A las orillas del río Mijares en la Playa del Molino en Cirat (Castellón), se ha llevado a cabo un taller didáctico y encuentro participativo organizado por AEMS Ríos con Vida, Centro Ibérico de Restauración Fluvial y la Fundación Nueva Cultura del Agua.
Se reunieron personas venidas de la comarca y de otras partes de la Comunidad Valenciana preocupadas por el presente y el futuro del río Mijares. La sesión se desarrolló en un gran ambiente de respeto y educación demostrado por todos los participantes, entre los que no estuvieron los alcaldes de la Mancomunidad del Alto Mijares. Hemos de agradecer encarecidamente a las técnicas de la Oficina de Planificación hidrológica que acudieran personalmente, dando respuesta a algunas de las consultas allí expresadas, y también a los varios concejales que tuvieron a bien asistir a la reunión.
El Taller de ecología fluvial fue desarrollado por Francisco M. Capel, profesor de la Universidad Politécnica de Valencia en el Dpto. de ingeniería hidráulica y Medio Ambiente y miembro del Centro ibérico de Restauración Fluvial: «La conectividad en los ríos ha sufrido un golpe tremendo, evitando mover gran cantidad de alimento e información. Las redes de información han sido los ríos y humedales de todo el planeta, que existen desde hace millones de años y se han perdido porque las personas hemos cortados estas redes en los últimos 150 años.»
A continuación, tomo la palabra Francesc La Roca , profesor jubilado de la Universidad de Valencia en el Dpto. de Economía Aplicada y miembro fundador de la Fundación Nueva Cultura del Agua, que explicó por qué es necesario recuperar los ríos: «Hay que recuperar los ríos y los demás ecosistemas acuáticos porque de ellos depende nuestra existencia. Los ecosistemas acuáticos nos proveen de muchas más cosas como son los servicios ecosistémicos que es la contribución de los ríos, lagos y humedales al bienestar de la sociedad»
Por parte de Pere Merino de AEMS Ríos con Vida dio cuenta de la situación actual del río, desde el embalse de Cirat (Montanejos) hasta el de Vallat, los caudales ecológicos mínimos propuestos y el estado de esta masa de agua. «Los parámetros físico-químico son buenos, pero el estado biológico y el hidromorfológico son deficientes, por lo que incumple claramente el objetivo de buen estado que tendrá que haber alcanzado obligatoriamente en diciembre de 2027. El problema más grave del río Mijares en esta zona es que su caudal es apartado de su lecho y conducido por tuberías en todo este tramo de unos 15 km para generar energía hidroeléctrica, dejando solo las aportaciones de fuentes y pequeños afluentes que son insuficientes para que pueda alcanzar y mantener el buen estado ecológico».
Para finalizar se llevó a cabo una mesa abierta donde todo el que quiso pudo participar exponiendo sus ideas, inquietudes y preocupaciones por este hermoso río y sus riberas, que forman parte de nuestras vidas y que todos coincidimos en querer recuperar y potenciar como eje vertebrador de nuestras vidas.