La violencia injustificada ha vuelto a golpear, esta vez a tres jóvenes dos de ellos con discapacidad que simplemente regresaban a casa tras asistir al derbi del partido entre el Villarreal y el Valencia, disputado en el Estadio de la Cerámica. Según los hechos relatados por Susana, madre de una de las víctimas, su hijo y dos amigos de 18 años fueron brutalmente atacados por un grupo de cinco individuos encapuchados, identificados como aficionados del Valencia.
Los jóvenes, que se desplazaban tranquilamente por la calle camino a casa después del encuentro, fueron primero insultados y acosados con miradas intimidatorias. La tensión fue en aumento hasta que los agresores decidieron pasar a la acción. De los tres amigos, dos fueron golpeados con extrema violencia, quedando uno de ellos con graves fracturas en la mandíbula y pérdida de varias piezas dentales.
La agresión ha generado una gran indignación, especialmente en las redes sociales, donde Susana ha denunciado los hechos asegurando que “no hay derecho” y reclamando justicia. Los aficionados del Villarreal ha mostrado su apoyo a los afectados, exigiendo una respuesta inmediata de las autoridades para identificar y castigar a los responsables.
El club ha sacado un comunicado oficial condenado la situación vivida. Lamentando lo sucedido y deseando una recuperación a los aficionados groguets.
https://twitter.com/VillarrealCF/status/1891093078108442832
Este episodio vuelve a poner en evidencia a la afición del Valencia en sus comportamientos poco ejemplares. Además de la necesidad de medidas efectivas para proteger a la afición local, garantizar su seguridad y disfrutar tranquilamente del futbol en su estadio.