La ciudad de Castellón y Vila -real han vivido una jornada negra en las carreteras con tres accidentes de tráfico en menos de 24 horas, dejando un saldo de varios heridos y una víctima mortal. La sucesión de siniestros ha generado preocupación entre los ciudadanos y las autoridades, quienes analizan las causas de estos incidentes.
El primero de los accidentes se registró a primera hora de la mañana en la ciudad de Castellón en Gran Vía, cuando una furgoneta colisionó con otro vehículo en un cruce y salió despedida hacia el paso elevado. El impacto provocó el desprendimiento de las vallas de seguridad, que cayeron sobre la Ronda y afectaron a otra furgoneta que circulaba por la zona frente al polideportivo Ciutat de Castelló. Afortunadamente, no se registraron heridos de gravedad, pero el tráfico quedó interrumpido durante varias horas.
Apenas unas horas después, un segundo accidente volvió a sembrar el caos en la ciudad. En este caso, otra furgoneta colisionó contra un turismo en el cruce de las calles Mar Negro y Mar Rojo. Aunque el impacto no fue tan severo como el primero, generó nuevas retenciones y obligó a la intervención de los servicios de emergencia para asistir a los afectados.
Sin embargo, el accidente más grave tuvo lugar 12 horas después en la carretera N-340, a la altura de Vila -real. En este trágico siniestro, un hombre de 77 años perdió la vida y otras tres personas resultaron heridas tras una colisión múltiple que involucró a una furgoneta cargada de naranjas, una motocicleta y un vehículo BMW X3. El accidente, cuyas causas aún están bajo investigación, ocurrió alrededor de las 16:00 horas y provocó importantes retenciones en la zona.


