- La entidad ha presentado hoy en la sede de la Cámara de Comercio la publicación ‘Regadío y seguridad alimentaria. La situación en España’, coordinada por Jaime Lamo de Espinosa y Alberto Garrido.
- La obra aborda la situación actual y los retos de la agricultura de regadío española ante la necesidad de optimizar la gestión del agua y garantizar el abastecimiento de alimentos ante la demanda creciente de la población.
En el marco de la conmemoración del Día Mundial del Agua, la sede de la Cámara de Comercio de Castellón ha acogido este mediodía la presentación de la publicación del Grupo Cooperativo Cajamar ‘Regadío y seguridad alimentaria. La situación en España’, coordinada por los catedráticos Jaime Lamo de Espinosa y Alberto Garrido. En el acto han intervenido el presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, y el director del Servicio de Estudios y Publicaciones de la Fundación Grupo Cajamar, Ignacio Atance, quienes han destacado la importancia de avanzar en la modernización y mejora de los sistemas de regadío en España, para lo que es necesario incrementar las inversiones y abordar este asunto al margen del debate político territorial.
“No podemos obviar el carácter estratégico que posee el regadío tanto para el territorio y la economía agroalimentaria como para el ámbito urbano y el turismo, a la vez que debe ser compatible con los objetivos de sostenibilidad medioambiental que debemos cumplir como sociedad”, ha recalcado Baamonde.
La publicación, que supera las 300 páginas y en la que ha participado una decena de especialistas en economía del agua, sostenibilidad, tecnología hídrica, política agraria y marco legal, analiza la complejidad actual del regadío español a partir de los datos estadísticos disponibles, y plantea, con argumentos científicos, las cuestiones clave para abordar el debate político y social en torno a la gestión óptima del agua en la agricultura.
Para ello, los autores han trabajado de manera retrospectiva para contextualizar la evolución que ha experimentado el regadío en España en las últimas décadas hacia un sistema más moderno, gracias una tecnología que ha permitido un mayor aprovechamiento del agua para producir más alimentos, asegurando el abastecimiento ante una población creciente y generar más valor, incidiendo directamente en la mejora de la calidad de vida y la renta de los agricultores.
Asimismo, la obra recoge los nuevos retos que supone la adaptación del sistema productivo, de las infraestructuras hidráulicas y de la gestión del agua a las consecuencias del cambio climático, y tiene en cuenta el periodo de pertinaz sequía actual. También analiza el impacto del trasvase Tajo-Segura y su situación actual como infraestructura estratégica para el futuro, y pone en perspectiva la política de regadíos de España ante la nueva Pol ítica Agraria Común.
Especialistas de referencia
Los coordinadores de la publicación son dos de los mayores especialistas de nuestro país en economía agraria y han abordado la situación del regadío en numerosos artículos y libros.
Jaime Lamo de Espinosa ha sido catedrático de Economía y Pol ítica Agraria en las Universidades Politécnicas de Valencia y Madrid y Catedrático ‘Jean Monnet’ de Economía por la Comisión Europea. En su etapa como ministro de Agricultura entre 1978 y 1982 negoció con Bruselas el Tratado de Adhesión de España a la Comunidad Económica Europea e impulsó la primera Ley de Seguros Agrarios. Premio Rey Juan Carlos I de Economía, también ha dirigido la ‘Revista de Estudios Agro-Sociales y Pesqueros’ y ‘Vida Rural’. Por su parte, Alberto Garrido es catedrático de Economía y Pol ítica Agraria de la Universidad Politécnica de Madrid y su actual vicerrector de Calidad y Eficiencia, tras haber dirigido durante cuatro años el Centro de Investigación para la Gestión de Riesgos Agrarios y Medioambientales (CEIGRAM). Asimismo, desde 2016 es director del Observatorio del Agua de la Fundación Botín. Su investigación se ha centrado en el análisis de la sostenibilidad de la agricultura y las políticas del agua y los recursos naturales. Es autor de 14 libros y 50 artículos en revistas científicas de impacto, además de haber dirigido 13 tesis doctorales.
En la publicación participan, además, los investigadores y expertos Irene Blanco , Luis Juana, Raúl Sánchez , Rubén Villa, Antonio M. Rico, Joaquín Melgarejo, M. Inmaculada López , Luis Garrote, Antonio Jiménez - Blanco y Tomás García Azcárate.
Publicaciones del Grupo Cooperativo Cajamar sobre el agua
La agricultura de regadío y la gestión del agua son dos de las líneas de trabajo fundamentales de los especialistas en agronomía y economía agroalimentaria del Grupo Cooperativo Cajamar, tanto a través del trabajo de innovación y transferencia que se desarrollan en sus dos centros experimentales en Almería y Valencia, como a través de la labor editorial de su Servicio de Estudios y Publicaciones. En los últimos años, la entidad ha dedicado varias publicaciones a esta temática, que están disponibles en formato digital para su consulta en abierto en la web de Plataforma Tierra. Y en todas ellas ha participado con anterioridad el profesor Alberto Garrido, ya sea como coordinador o coautor: ‘La economía del agua de riego en España. Una perspectiva regional’ (2009); ‘Los mercados de agua en España. Presente y perspectivas’ (2016) y ‘El regadío en el Mediterráneo español. Una aproximación multidimensional’ (2019). Jaime Lamo de Espinosa , por su parte, coordinó en 2009 el volumen número 15 de la Colección de Estudios ‘Mediterráneo Económico’ de Cajamar, titulado ‘El nuevo sistema agroalimentario en una crisis global’, en el que también se presta especial atención a la problemática del agua.
Regadío y seguridad alimentaria. La situación en España
Los profesores Jaime Lamo de Espinosa y Alberto Garrido coordinan el trabajo de una decena de especialistas en economía del agua sobre el papel del regadío en la agricultura y la economía españolas
La agricultura de regadío en España es heredera de una visión jovellanista, alimentada y promovida por Costa y políticos de todos los signos y regímenes políticos del siglo XX, y creada por muchos ingenieros agrónomos, políticos y juristas. Es también subsidiaria de unas condiciones geográficas y climáticas muy particulares. Condiciones que existen también en California y parte del Oeste de EEUU, Australia, Chile, México, sur de Europa y Oriente Próximo.
Sin embargo, el regadío de hoy poco tiene que ver con el del siglo XX. El control del agua, la agronomía, la genética y la tecnología permiten al regadío producir mucho más cantidad y valor con mucho menos agua y fertilizantes. Todo ello ha dignificado el trabajo, y mejorado sensiblemente su productividad y las condiciones de vida de los agricultores.
No es difícil imaginar cómo sería el paisaje y el mundo rural español si no existiese el regadío. Lo que no es tan obvio es imaginar cuán limitadas y costosas serían nuestras dietas y cómo de difícil sería lograr alimentarnos de manera saludable. La producción agraria vegetal estaría al albur de la climatología, y solo podrían subsistir explotaciones de gran escala, basadas en producciones de cereal, leguminosas y barbecho, olivar, viñedo y almendros, de muy bajo y volátil rendimiento. El sector agroalimentario tendría una fracción del tamaño que tiene y España importaría cada año el triple de lo que importa sin apenas capacidad de exportación.
Pero también sería irreconocible el regadío español para alguien que viajara en el tiempo desde 1986 (año de entrada de España en la CE y de entrada en vigor de la Ley de Aguas de 29/1985) a 2022, al observar el desarrollo tecnológico, la calidad y estabilidad de la producción, los cultivos y productos, el manejo del agua y los insumos, y el manejo de los suelos. ¿Alguien puede dudar que la silenciosa revolución digital y de la genética no sea el único camino para hacer la agricultura más productiva, más sostenible y más generadora de empleo en el mundo rural? En España es justo en el regadío donde esta transformación ha tenido mayor profundidad e impacto, pero es tal vez la más desconocida.
El objetivo de esta obra es mostrar con datos objetivos esta realidad, proporcionando una visión analítica de esta compleja realidad recorriendo su evolución y proyectándola al futuro. Ligado a ello, intenta subrayar el carácter estratégico del regadío para el territorio, el mundo urbano, el turismo y la economía agroalimentaria y su compatibilidad con los objetivos ambientales que una sociedad avanzada desea ver cumplidos.