El Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPCV) recuerda que la primavera es una de las épocas más complicadas para la salud de los pies, puesto que empezamos a intercalar un calzado cerrado con otro abierto y no lo hacemos siempre usando el más adecuado. De este modo generamos un impacto y un estrés en los pies y en su sensible piel, que dan origen a numerosos casos de talalgias, tendinitis y fascitis.
Por eso resulta fundamental que antes de llegar este momento del año se acuda al podólogo para que éste examine el estado de los pies y valore su hidratación, el estado de las uñas…
Además de revisar los pies, conviene revisar el calzado del verano anterior y comprobar que tanto su interior o su suela no están especialmente deteriorados. Y si hay que comprar un calzado nuevo, apostar por modelos cómodos y elaborados con materiales flexibles y transpirables para que no proporcionen esa humedad que puede dar origen a hongos a causa del sudor.
Hacer una transición moderada de un calzado cerrado al abierto, y lavar los pies secándolos minuciosamente e hidratándolos bien son otras de las recomendaciones que nos ofrecen los profesionales.
La cirugía de mínima incisión, una respuesta eficaz para tus pies
Y aquellos que sufren dolencias más graves, tampoco deben renunciar a tener unos pies sanos y bonitos. Y menos todavía desde que las cirugías mínimamente invasivas son una realidad cada vez más frecuente. En Vila -real, hace unos meses era el reconocido podólogo Jordi Mata, quien nos descubría las ventajas de este tipo de intervención que ofrece resultados “óptimos, sin complicaciones, con una rápida recuperación y un postoperatorio indoloro”, tal y como aseguraba el propio Jordi Mata que, como miembro de AEMIS, es uno de los pocos profesionales de la provincia que desarrolla este tipo de intervenciones.
Todos los pacientes que ya han confiado en esta cirugía presumen de pies por la playa este verano. Pies sin juanetes, sin dedos en garra, sin helomas interdigitales, sin helomas en planta, sin dedo infradupto o supradupto… Pies que ya no sufren y además ¡lucen como nunca!