La actriz pasó de ser la «novia de España» en los 50 a la entrañable «abuela de todos» en los 90
Mucho antes de que actores y actrices españoles, como Antonio Banderas o Penélope Cruz, dieran el salto a Hollywood otras ya lo habían hecho muchos años antes, como Sara Montiel. Uno de esos casos es, también, el de la pionera Carmen Sevilla que, en aquellos 50, se codeó con actores de la talla de Frank Sinatra, Gary Cooper, Cary Grant o, más tarde, con Charlton Heston, con quien coincidió en el film ‘Marco Antonio y Cleopatra’, y lo hizo siempre de manera elegante, tanto en la pantalla como fuera de ella.
‘Rey de Reyes’ en el imperio cinematográfico estadounidense, o en España películas como ‘La Revoltosa’, ‘La fierecilla domada’ o ‘Violetas imperiales’, junto a su amigo Tony Leblanc y su querido Luis Mariano, la convirtieron en icono de toda una generación.
En nuestro país se convirtió en el objeto de deseo de muchos hombres, y también mujeres, pues su belleza y espontaneidad la convertían esencialmente en un alma imposible de olvidar y de evadir.
Fue actriz, cantante y bailarina y, lo mejor de todo, supo adaptarse al paso del tiempo y de los años, convirtiéndose así en una figura entrañable en todos los hogares, principalmente en la década de los 90 e inicios de los 2000 a través de la televisión.
María del Carmen García Galisteo (Sevilla, 16 de octubre de 1930), más conocida como Carmen Sevilla, la llamada “novia de España” nos dejó ayer a los 92 años tras una larga enfermedad, pero no solo queda la estela de alguien a quien todos querían, sino una artista que parecía capaz de hacerlo todo bien. Descanse en paz.