Es una de las ciudades con más atractivos dentro de la provincia de Castellón. Borriana es cultura y es ocio, es patrimonio y naturaleza, es descanso y es fiesta. Sus playas de Grao-Malvarrosa y del Arenal, son uno de los principales encantos que presenta en esta época de verano, pues son reclamo para aquellos que buscan el descanso y la tranquilidad junto a sus aguas templadas, pero también para aquellos que apuestan por la adrenalina que ofrece el deporte náutico o la música en vivo, como la del reconocido festival, Arenal Sound. Y más allá de la época estival, la ciudad cuenta con un intensivo calendario en el apartado de fiestas y tradiciones, en el que las Fallas ocupan un protagonismo destacado. Pero además las fiestas de San Blas, la Misericordia o las Cruces de Mayo, hacen que los borrianenses abran las puertas de su localidad para recibir a visitantes y mostrarles sus tradiciones más arraigadas. A esta oferta se suma también la gastronomía, rica en pescados y mariscos de lonja, distinguida por sus arroces, y avalada por distintas jornadas gastronómicas como las de la naranja, o las dedicadas al pulpo, la sepia o el langostino, sin olvidar, la Ruta de la Tapa.
Patrimonio natural y arquitectónico
Otro de los puntos fuertes que nos detiene en Borriana es su patrimonio natural y arquitectónico.
Espacios tan singulares como El Clot de la Mare de Déu, un paraje natural protegido donde converge una rica fauna y flora, o el sorprendente recorrido que se puede descubrir durante la Ruta de les Ermites son, sin lugar a dudas, una de las mayores riquezas ecológicas que esconde la provincia entre campos de naranjos.
Pero la huella que dejaron marcada las tres civilizaciones que tuvieron presencia en el municipio, musulmanes, judíos y cristianos, hoy todavía sigue vigente. Borriana presume con orgullo de la magnífica Basílica Menor de El Salvador o su campanario El Templat.
Pero quizá su mayor tesoro se esconde entre sus calles, herencia del esplendor vivido en los años 30 del siglo pasado gracias a la presencia de potentes comercios de exportación de cítricos.
Borriana, una ciudad modernista
Consciente de la relevancia de los edificios modernistas que se conservan entre sus calles céntricas, el municipio ha impulsado una iniciativa que recuerda y pone en valor esta etapa de esplendor en Borriana. Con las jornadas ‘Borriana, París i Londres’, el visitante tiene la oportunidad de reencontrarse con ese patrimonio, no solo arquitectónico, sino también con el musical, artístico y literario del Modernismo.
Gracias a estas primeras jornadas, llevadas a cabo recientemente en Borriana, la ciudad se ha convertido en un plató modernista con gran variedad de actividades lúdicas y culturales, así como exposiciones, recitales, visitas guiadas, teatralizaciones, encuentros con personajes o ambientación musical…
Todo ello junto a un itinerario que permite conocer cuatro de los 24 edificios catalogados dentro de los inmuebles protegidos del centro histórico de Borriana: la antigua casa de Matilde Reig a la Carrera, la de Boix en la calle Mayor, el antiguo Círculo Frutero y la antigua casa de Bernabé Perís en el camino de Onda. En cada una de ellas se reproducía algunas actividades propias de la época.





