El fallecido en el acto taurino de la Fira d’Onda de ayer por la tarde tenía 55 años y era vecino de la Vall d’Uixó. El hombre sufrió una cornada en el muslo izquierdo, junto a la ingle, que le perforó la femoral. También presentaba un fuerte golpe en la cabeza.
Desde que se han vuelto a permitir las celebraciones taurinas en las calles es la primera muerte en la provincia derivada directamente de este hecho. Horas después, en la Pobla de Farnals, los actos taurinos dejaban dos personas más heridas de gravedad.